La casa antigua de estilo colonial está situada en medio de un exuberante jardín con árboles centenarios y una impresionante vista a la montaña. Sus paredes de piedra y su techo de tejas rojas le dan un aire rústico y acogedor. Al entrar, te transportas a otra época gracias a sus techos altos, sus amplias habitaciones y sus pisos de madera tallada a mano. Cada rincón de la casa está lleno de historia y encanto, con muebles antiguos y detalles decorativos que te hacen sentir como si estuvieras en un cuento de época. Disfruta del ambiente tranquilo y relajante de esta casa única, perfecta para aquellos que buscan un escape del bullicio de la ciudad y sumergirse en la belleza de la naturaleza.
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